El cardenal que supuesta o fantasiosamente pudo ser Papa, perdió otra vez. No contra el Diablo o contra Dios sino contra la vida. Que lo deja más desairado. La aprobación del matrimonio igualitario reveló la desigualdad espiritual con que la Iglesia trata a personas a las que presume condenables y peligrosas.
Hace dos años también perdió- aunque pareció haber ganado- cuando apoyó la gesta fenicia de la Mesa de Desenlace. Su alianza con los comerciantes de la soja vestidos de gauchos buenos, en el tiempo no le fue rendidora. Así que ambas derrotas sinceran su determinación opositora contra este Gobierno.
La alta Iglesia no comulga con la kinesiología, el kilovatio, el kilopondio, el kantismo ni el karate. ¿Se entiende, no? El cardenal que supuestamente pudo ser Papa solo es ahora el padre de la derrota. Muchos políticos opositores que se aprovechaban su influencia entre los fieles van a empezar a dejar el crucifijo en el respaldo de la cama, y a prestar exclusiva atención a sus bancas que democráticamente son laicas.
Perdieron también otras iglesias y congregaciones atrapadas en el hipotético mar de las almas puras. Ya que por insistir en contradecir y negarse a reconocer la movilidad de la vida terrestre ahora no pueden encontrar las almas celestiales.
Los 2.500 millones de pesos por año que destina el Estado a las escuelas católicas , ojalá sirvan para actualizar su anacronismo histórico-pedagógico.
Las voces de jueces que hoy anuncian que no casarán a parejas del mismo sexo por objeción de conciencia confirman la debilidad de la Justicia, depositada en personas atravesadas y colmadas de sentimientos personales, ideologías, estructuras culturales y prejuicios que privilegian. Quien se crió y educó creyendo que lo blanco es más blanco que lo negro, cuando llega a juez pensará lo mismo, aunque causará más daño. Hace ya un tiempo se exigió en tribunales y juzgados quitar imágenes e íconos de la Iglesia porque conspiraban contra la idea plural de que un ciudadano debe ser juzgado por la Justicia y no por ninguna Biblia.
Perdieron los grandes medios opositores porque, en su afán de atribuir la avanzada igualitaria a la presión del Gobierno, no contaron con que la sociedad iba a afirmarse en sus convicciones y no en cuestiones partidarias. Y para no seguir perdiendo público ni lectores se dieron vuelta.
El matrimonio igualitario destituye un privilegio social: el de los discriminadores que ahora se quedan sin letra. No es que homosexuales y lesbianas sean iguales entre sí, ni tampoco con respecto a los heterosexuales. Somos diversos y eso no cambia. Lo que cambia es el papel de los discriminadores: porque si no se corrigen, serán ellos los discriminados. Por suerte la libertad que consigue una minoría menoscabada, le hace perder la libertad de menoscabar a los menoscabadores. En cuanto al cardenal derrotado solamente Dios sabe por qué le soltó la mano.
Carta abierta leída por Orlando Barone el 10 de Julio de 2010 en Radio del Plata.
Impecable, imperdible y maravillosa reflexión.
ResponderEliminarGracias Maestro!!
"Lo que cambia es el papel de los discriminadores: porque si no se corrigen, serán ellos los discriminados".
ResponderEliminarEstimado Orlando, estoy totalmente de acuerdo con su artículo. Ahora bien, esta frase que entrecomillé, ¿no será una expresión de deseo únicamente? ¿Está usted tan convencido de que los discriminadores (que justamente coinciden con una importante y derechosa clase media, y con sectores ligados al poder) han perdido esta batalla tan fácilmente? Ojalá que así sea, ojalá que estemos siendo testigos de un rotundo cambio. Hasta luego. Lo invito a pasarse por mi blog: www.milani-maximiliano.blogspot.com.
sencillamente impecable...que suerte encontrar una voz coincidente, coherente, simple y sincera entre tantas bravuconadas...un abrazo orlando...
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarUn discriminador no solo lo es con los
ResponderEliminarhomosexuales, lo es con los negros con
los pobres y tanto los bergoglios como
los evangelistas y otras religiones son discriminadores escondidos
detrás de sus convicciones "religiosas".
Y los jueces (algunos) que se la dan de
imparciales, lo que tendrían que hacer es
renunciar ya que sus "consiencias" no le
permiten apartarse de su fé religiosa, y
no amenazar como lo están haciendo que no
es otra cosa que una forma de discriminar.
ROBERTO, me parece que te equivocas, en referencia a los jueces, pues el artículo 30 del Código Procesal de la Nación, les permite excusarse por razones de decoro personales, es más, me parece mucho más sano que se excuse, y que lo case un juez subrogante que no tenga objeciones. La ley puede imponer conductas, lo que no puede es imponer sentimientos e ideas, ni obligar a sentir y pensar de determinada manera, al excusarse ,el juez no objeta la ley, ni impide su aplicación pues siempre habrá un juez subrogante.
ResponderEliminarQue carta memorable Orlando!!!!
ResponderEliminarPensaba que el cardenal es un pájaro, símbolo de libertad, de vuelo. ¿por qué portará ese nombre un cargo eclesiástico que tiene amarras y ataduras al medioevo?
La iglesia católica, si fuera fiel a su prédica, debería ser la abanderada de la inclusión, del acompañamiento de los más débiles, como hubiera hecho Jesús a quien dicen representar.
Queda demostrado el más aberrante cinismo de las cúpulas.
Asi es exactamente como alguien escribió a las 14,02 "estan siendo testigos de un cambio rotundo" en muchos aspectos, pero como el actual, que les entró hasta la médula y es un asunto "muy peligroso", habría que rescatar lo de Víctor Hugo cuando dijo más ó menos: a los ratones como yo, les resulta muy complicado entrar en esos "temas". De todas maneras ya empezó a salir a la superficie el art2 de nuestra Constitución Nacional y tendrían que leer, como principio del asuntito, a Eduardo Blaustein, creo de Miradas al Sur ó Carta Abierta, pero con "serenidad y precaución", dado que es a todo ó nada. Saludos de un callejero.
ResponderEliminarEXTRAORDINARIA CARTA, BARONE, COMO SIEMPRE!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarLos invito a sumarse al grupo "Derogación del art. 2 de la Constitución Nacional Argentina", para que se saque de una vez por todas la clausula de que un presidente tiene que ser catolico. Soy catolica, educada en un colegio religioso, pero nunca deje de ser "pensante", por lo que estuve casada (mas de treinta) con un tipo judio, y me opongo a cualquier tipo de discriminacion. Y me opongo a la Iglesia retrogada, aliada al poder economico y enemiga de los que ideologicamente no se les parecen. Igual me opongo al mundo musulman fudamentalista, donde no se respetan las diferencias. Habra perdido el cardenal como dice la carta de Barone, o se estara complotando para una nueva batalla? Las sociedades tienen que ser LAICAS!
Como no van ser discriminadores, si lo que han hecho siempre es haberse discriminado ellos mismos del pueblo. Lo hicieron para actuar como fuerza de choque, para conducirlo, ya que una organización cerrada puede penetrar, confundir, ser quinta-columna, mimetizarse, y abusar de la indefensión del pueblo,y torcer su verdadera esencia para usarlo a sus fines. Toda organización cerrada tendría que autodisolverse, evitando el abuso al pueblo. Uno de los mejores mensajes del Gral.Peron, fue cuando nos dijo a los peronistas que cada uno individualmente poseía el baston de mariscal. Usted Sr.Barone como Sandra Russo y los compañeros que escriben aquí, poseen ese baston y lo usan desde si mismos, ese es el mejor ejemplo del tipo de sociedad que merece el pueblo. Que cada argentino tenga su baston de mariscal y lo use desde su esencialidad, que es amorosa,integradora,sensible,esclarecedora y gloriosa
ResponderEliminarInvitación aceptada SUCA, pero en forma circunstancial, pues como callejero, hay períodos que me llaman "manuchau". Saludos.
ResponderEliminarQuerido Orlando.
ResponderEliminarComo siempre muy clara y contundente tu carta.
Suca adhiero a tu propuesta,además, estoy en igualdad de condiciones, soy cristiana, me eduqué en escuela religosa, no estoy con ningún tipo de fundamentalismo y estoy junto a mi marido desde hace 41años, que tiene origen judío. Es una aberración anacrónica imponer una determinada religión para ser presidente .
Cariños
susy
Ellos perdieron, porque estamos ganando las buenas personas.
ResponderEliminarCinthya (19) de Morón.
Parece que los fanáticos religiosos no sólo están habilitados a discriminar, sino también a pecar. Ellos siempre tienen la opción del perdón celestial.
ResponderEliminarCuando murió mi suegro (japones), hubo 3 ceremonias, vino un "cura" (no se como se llama) shintoísta que se la pasó hablando en japonés cantado y chupando shake, luego la misa católica y por último una ceremonia pentecostal. Supongo yo qye el alma del viejo esta un poco reencarnada, otro poco de joda con los santos subido a una nube, y vaya a saber donde la parte restante.
El fanatismo que despierta lo religioso (que al no ser nada constatable ninguna o todas tienen razón) lleva a la persona a degradarse de tal forma que pierde todo raciocinio y está lista para hacer lo que dios manda (o sea su pastor), puede llegar a matar o morir en su nombre. Eso sí, no le pidan ningún sacrificio por comprender y entender al otro.
Raro bicho el ser humano, rendido a "la palabra divina".
Bergoglio es el pastor y el rebaño responde, ya lo vimos en visperas de aprobación de la nueva ley de matrimonio. Y le importa un rábano lo que pensemos ya que con las "propinas" de su grey y los subsidios de un histórico Estado bondadoso le alcanza y sobra para un pasar de rey.
Me curé de espanto con las religiones hace ya mucho tiempo.
No obstante le pongo una piedra a la pachamama cuando veo una pirámide perdida en algún vallecito andino. Es que los de allí discriminan menos.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarLa discusión franca es maravillosa, pero enmierdar un blog para que nadie pueda opinar no es discusión franca.
ResponderEliminarSobre los jueces con objeciones de conciencia: Habría que tratar con mucho cuidado este tipo de actitudes, porque un juez podría ser ateo y negarse a casar católicos, que son gente tan rara que piensa en casarse con la hermana o el perro. Y otro podría negarse a darles niños en adopción, para que no le muestren imágenes de personas torturadas, que podría confundir a niños pequeños, en etapa de formación.
Se sabe, cuando la discriminación empieza, quién sabe dónde termina.
Se sabe, cuando la discriminación empieza, quién sabe dónde termina.
ResponderEliminarQuizás escrito por otra persona lo comprendan...
Grande, Cyn!! Pienso lo mismo!
ResponderEliminarLa batalla cultural que se viene dando, y que conduce nuestra Presidenta, da cuenta que algo está cambiando en nuestras estructuras socio-culturales.
Si bien estoy de acuerdo que habría que derogar el art2 de la CN, considero también, que no sería una medida suficiente. Se podrían también, eliminar los altos subsidios a las escuelas católicas, que además, cobran cuotas altísimas. El status que se le otorga a muchas de ellas por esos altos costos es el precio que pagamos todos como sociedad. Gran parte de la tilingada -sobretodo la porteña- instruída en esos "colegios" son los que llevaron a Macri y a Michetti a la jefatura de gobierno.
Me parece que cuando dejemos de comprar esos modelos de éxito y de nivel social, será posible que la acción de la jerarquía eclesiástica y del poder dominante, sea parcialmente derrotada.
Entiendo que se necesitan mucha voluntad política y un fuerte respaldo social para lograr cambiar estos patrones dominantes. Es difícil, pero no imposible.
pepe luján, no te tomes el trabajo inútil de victimizarte. Te ganaste el fastidio del resto en buena ley. Participar en este blog es lo más fácil que hay. Podés disentir en un todo o en parte con el escritor y con los contertulios, podés incluso disentir con el gobierno y con todo el arco del progresismo nacional. Lo que no podés es insultar, rebajar, mentir, copypastear notas sin firma, y todo eso que los trolls hacen continuamente y que llena la paciencia.
ResponderEliminarQuedate, opiná como te salga, exponenos tus razones por las cuales estás en desacuerdo, esquivá las chicanas de siempre y tal vez todos nos enriquezcamos con tus entradas, como hacemos con las entradas del resto.
No hace falta que elogies a Barone, ni a Néstor ni a nadie, tampoco hace falta que adhieras al sicristinismo.
Acá entraron opositores centrados y justos, y los debates (que estaban buenísimos) fueron interrumpidos por los insultos de los trolls, y esa gente no entró más.
Si podés respetar las reglas de convivencia de cualquier comunidad vas a ser bienvenido. Conozco personalmente a varios de los asiduos a este blog, y son gente amable y educada, que quiere participar sin ser agredida, como todos.
Pepe lujan: ¿a las 2:52 del Día del Amigo no tenías mejor cosa que hacer que lloriquear en este blog?
ResponderEliminarEscribí media idea en lugar de tus acostumbrados "obsecuente" y tal, no trates de ser sarcástico porque te sale horrible, abrite un blog, leé un diario que no sea Clarín...
Y te deseo, de todo corazón, que hasta tal punto tengas una vida que a las 2:52 de cualquier día lo que menos se te ocurra sea ponerte a escribir pavadas en un blog, cualquiera que sea.
Estimado Fabian:
ResponderEliminarNo acostumbro a copiar y pegar. te puede gustar mas o menos lo que pienso pero soy honesto con mis ideas y jamas.
Jamas insulte a nadie, como es la costumbre de tus amigos.
Es mas nunca conteste ningún insulto ni lo pienso hacer, y has visto que censuraron dos comentarios míos sin insulto, sin copiar de nadie y solo dejando una reflexión.
Bueno te dejo y sin antes decirte que ya este gobierno y sus acólitos nos tiene cansado con sus censuradas directas, solapadas y groseras.
Ahora si queres escribir y que nadie te conteste mandale un mail a tanto disciplinado que pulula en este blog.
Saludos de alguien que no piensa como vos pero daría la vida por que los dejen expresarse libremente.
pepe lujan: sí que insultaste, insultaste nada menos que a Barone (en el blog de Barone, coincidentemente), lo llamaste "obsecuente" más de una vez, y de otras maneras más o menos sinónimas. Los que tuvimos el privilegio de leer tus mensajes antes de que fueran eliminados sabemos que eran sumamente insultantes. No decías "boludo" ni "caca", pero hay muchas maneras de insultar; no te hagas el santo. De modo que eso de "jamás insulté a nadie" simplemente no es cierto.
ResponderEliminarRespecto de tu última frase, "Saludos... libremente", es una mala copia de la de Emerson, Lake and Palmer que tan sabiamente supo citar Gustavo Alberto.
¿Cuando decís que este gobierno "nos" tiene cansados, a quiénes te referís? ¿A pepe y a lujan?
Suca adhiero a la derogación del viejísimo artículo, época en que los curas estaban metidos en todo lo político de los conolizados.
ResponderEliminarYa no corre, no?
Acá se aceptan todas las religiones y no hay porqué mantener económicamente a la católica que del Cristo, no tiene nada.
Lo mío es: Dios y vos, sin intermediarios.
Hay algo del programa de anoche que me gustaría aclarar, ya que lo espiritual es lo mío; pero basado en sabiendo, no creyendo cualquier cosa.
En nombre de dios se cometieron los horrores mas grandes de la humanidad, incluso las guerras. De qué dios? Y el No matarás?
Los que encontraron al demonio como su dios dicen estar haciendo bien las cosas - como los de la junta, o el cardenal éste - ya que su objetivo es separar, discriminar, matar (igualito a bush) quien creen que es el dios del que hablaba bush? éstos hablan del mismo.
Por eso sienten que hicieron bien las cosas - para su dios, por supuesto - y van a seguir defendiendo sus actos porque realmente creen ser instrumentos de dios, por eso las palabras de videla.
Son los creadores de ateos, de terroristas, etc. porque se creen superiores a los demás y con derechos celestiales - como hitler -
Ellos representan realmente los últimos estertores de la bestia, así que nada que ver con Dios, no?
Y si Barone, ellos van a quedar discriminados, porque Dios no le soltó la mano, nunca se la tuvo; es cuestión de analizar la historia de la católica para darse cuenta de qué lado estuvo siempre.