miércoles, 23 de junio de 2010

De la Odisea a Maradona

Y eso que jugó Sócrates. Pero los griegos extrañaron a Pericles, a Arquímedes, a Tales de Mileto, a Heráclito y Pitágoras. Vivieron su odisea mundialista sin contar con la pluma de Homero. Porque el poeta ciego de haber estado hoy habría cantado versos en argentino. Y éstos les ganaron, al fútbol. No fue una lucha entre la civilización helénica y la cultura criolla. Ni entre Platón y Maradona. Fue una cuestión lúdica, un torneo de destrezas. La selección argentina reúne dones tan opuestos como los de Messi y Palermo. Uno la poesía y la lírica, el otro la prosa sin metáfora; Messi la sinfonía ; Palermo el rock duro. Y sin embargo congenian. Si hay algo en el equipo que congenia es el genio con el esfuerzo. La pirueta con la fatiga. Y el origen con el post grado en otras geografías. Es como si hubieran estado juntos en una situación extrema que los hermanara en un código muy íntimo. Impenetrable e inextricable para agoreros y buscapleitos de vestuario; invulnerable a los chismes y al mal deseo partidista o ideológico, que nunca faltan. Y no sé consecuencia de qué es ese amasijo de abrazos y de besos y de palmadas de trasero que se intercambian, a la par que se rozan y soban tan cercanamente casi en el umbral del pensamiento incorrecto. Tampoco se sabe si ese “abrazismo” corpóreo es resultado de afanes sicológicos y terapéuticos, de libros de autoayuda, de masajes de miel o del puro instinto. Pero una intensa pulsión de alegría los vincula y abraza. Diego Maradona cataliza ese estado de ánimo. Ánimo es alma. A veces desgraciadamente desalmada. Otras, como ahora, alma solamente. Alma a lo grande. Algo hay en gran parte de la sociedad argentina que sigue bicentenaria como si para si misma prolongara aquella gran fiesta. Una alegría privada y pública. Alegría de época, tan justificada como cuando hace diez años era justificada la amargura sin futuro. Esta es una alegría antídoto, que protege de la conspiración y el negativismo que todavía sobran en algunas regiones de la otra alma. Por suerte en retroceso anímico, porque no adherir a la alegría es desunirse. Y es Maradona en su mejor estado angélico- precisamente él que ha padecido otros estados que ya ni recuerda ni nosotros tampoco- la esponja que se abre y que absorbe lo que esa sociedad sonríe, canta, desea, augura y sueña. ¡Y cuánto absorbe esa esponja! Cuando él recibe mensajes de sus hijas va a leerlos a escondidas para que los jugadores no le vean los ojos húmedos. Y sale del escondite con los ojos llenos de ilusiones. Prestemos atención a ese esfuerzo de acumulación masiva en un solo individuo. Y con un atributo: la esponja solo absorbe alegría. Y descarta los estados de ánimo maliciosos y sombríos. En su interior purifica todo lo que ingresa. Hasta el drama más denso. Y después lo transfiere procesado. Extraordinario circo el fútbol. No da pan. Pero no impide que quienes no lo tienen puedan conseguirlo. Sigamos llenando a la esponja. Aún le queda lugar para absorber y repartir toda la alegría argentina. Si la leyenda le atribuye al griego Homero haber nacido en siete ciudades; la leyenda le atribuirá al argentino Maradona haber nacido siete veces.

Carta abierta leída por Orlando Barone el 23 de Junio de 2010 en Radio del Plata.

11 comentarios:

  1. El griego que sí estaría contento sería Epicuro; pura búsqueda de placer (encontrado: bien los jugadores!!!)... Ataraxia!

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  2. Ese equípo que decís ya jugó,si querés fijate en mi blog que está ese partido.Saludos.

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  3. Interrumpo un minuto esta transmisión con permiso del dueño del blog y compañeros, para recordarles que este viernes "La Barone" festeja. El que esté interesado en sumarse, lo espero en mi mail o visiten el mail de Roxana, para darle más detalles del encuentro.
    Gracias y disculpen. Que se reanude la transmisión! Adelante!!

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  4. Muy bueno Orlando, Maradona es lo más grande que hay.

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  5. Una carta como un caño de taco y más toques entre Messi, Verón y Pastore.
    Una carta, como un fierrazo de Palermo.
    Una carta como un abrazo del Diego.

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  6. Hermosa carta.

    Soy de las que no entienden de fútbol pero que siento y comprendo lo que generan la camiseta y el liderazgo ejercido por Maradona.

    Un compañero bloguero publicó una foto de una bandera que cuelga en la tribuna argentina con el dibujo de Diego y una leyenda:

    "Si no lo entendés es porque no lo sentís".

    Tal cual!

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  7. Los griegos supieron jugar un gran mundial, pero no fue particularmente el de Sudáfrica 2010...

    http://www.youtube.com/watch?v=45dohBzMYm4

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  8. Lucho, mal que me pese... Agüero jugó mejor que Milito, che!

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  11. En ocasión de la derrota en Bolivia algunos amigos en charla de café criticaban duramente a D10S de terracota, que podría ser todo lo que fué pero como técnico no servía, que tenía las neuronas quemadas, que nunca fué ejemplo de nada y otros etc.
    Mi actitud por casi media hora de discusión fué de oyente, luego de sentir rebasada mi paciencia y contra el consenso general de la mesa pregunté: ¿Puede alguien, que no jugó en primera, que no fué ídolo, que no se puso cualquier equipo en el que participó al hombro, que no fué campeón y subcampeón mundial, que no hizo el gol más fabuloso de la historia, que no fué el mejor jugador de la historia del futbol mundial; insinuar que Maradona está incapacitado para dirigir un equipo de futbol?
    (silencio....)

    Me quedo con Diego y sus pocas neuronas bien usadas que con muchos que tienen millones inutilmente.

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